La lengua materna de una persona puede influir en el modo en que su cerebro establece conexiones entre distintos centros de procesamiento de la información, según revela un nuevo estudio de escáner cerebral.
Las diferencias observadas en las estructuras de estas redes lingüísticas estaban relacionadas con las características lingüísticas de las lenguas maternas de los participantes en el estudio: alemán y árabe.