A pesar de que su uso está muy extendido en el lenguaje bancario, se sigue desaconsejando su empleo.
Locución: grupo de palabras que funcionan como una sola pieza léxica con un sentido unitario y cierto grado de fijación formal. De antemano, caer en la cuenta, el qué dirán.
Frase hecha: dos tipos. 1) Es de uso común y expresa una sentencia a modo de proverbio. Nunca segundas partes fueron buenas. 2) En sentido figurado y con forma inalterable, es de uso común y no incluye sentencia alguna. Como anillo al dedo.
Refrán: dicho agudo y sentencioso de uso común. No hay mal que por bien no venga.
Aunque se usa mayoritariamente como pronominal, también se usa como no pronominal: Roque se casó con Antonia/Roque casó con Antonia.
El voseo rioplatense, uso de de vos por tú con su correspondiente paradigma verbal (flexiones diferentes del verbo en presente de indicativo y en imperativo correspondientes a la segunda persona del singular: vos comés, vos comé), está plenamente aceptado por la norma culta y, desde el punto de vista académico, ya forma parte del sistema lingüístico de la región.
Para indicar frecuencia temporal, se emplean mayormente las preposiciones por, a, en. El uso más habitual de una u otra depende de la región. Sus oraciones están bien formuladas, aunque respecto a la última, lo más adecuado sería decir en la semana porque en semana podría interepretarse como entre semana, es decir, excluyendo los sábados y domingos.
La correlación temporal establece que si el verbo de la oración subordinada (aquí: Tan pronto se abra la biblioteca) está expresado en presente de subjuntivo, el verbo de la principal debe estar en futuro de indicativo. Entonces, las oraciones adecuadas son las siguientes: Tan pronto como se abra la biblioteca, mejor se apreciará su valor histórico. Tan pronto como se abra la biblioteca, mejor se podrá apreciar su valor histórico.
Las siglas y los acrónimos se crean a partir de las denominaciones desarrolladas y no al revés. Es decir, primero existe el organismo, asociación, institución, término, etc., con su respectivo nombre (común o propio), y luego la sigla o el acrónimo que se forma a partir de aquel. La forma adecuada de escribir las siglas, y los acrónimos en general, es con todas sus letras en mayúscula. Así, OMS es la sigla de Organización Mundial de la Salud; AIE de Agencia Internacional de Energía; OPEP es el acrónimo de Organización de Países Exportadores de Petróleo; IVA, el acrónimo de Impuesto al valor agregado; PIB, el acrónimo de producto interno bruto.
Los acrónimos pueden ser tratados como sustantivos comunes cuando se lexicalizan (como radar, láser, sida); o escritos con inicial mayúscula como en Unicef. Cuando están lexicalizados, no se emplean sus expresiones desarrolladas. Por ejemplo, nunca se hace referencia a radio detection and ranging para mencionar radar.
Los acrónimos sicav y socimi no son nombres comunes, puesto que no pertenecen al léxico general del español. Se escribirán SICAV y SOCIMI o Sicav y Socimi.
Los sustantivos en aposición se escriben por regla general en singular. No obstante, cuando el sustantivo en aposición puede funcionar como atributo en una oración copulativa y esta tiene sentido completo, el apositivo podrá escribirse tanto en singular como en plural. Por ejemplo, como la oración Los hombres son ranas es un sinsentido, el sustantivo rana se usará en singular cuando esté en aposición: los hombres rana. Pero decir: Los decretos son leyes, encierra plena significación, por lo que tanto decretos ley como decretos leyes son combinaciones adecuadas.
Ambas construcciones son igualmente válidas.