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Premio Príncipe de Asturias


Nuevo galardón para Álvaro Mutis

El escritor Álvaro Mutis (Bogotá, 1923), que el pasado mes de abril obtuvo el Premio Príncipe de Asturias de las Letras, logró ayer el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana. «La poesía es la más alta manifestación del hombre», afirmó ayer Mutis desde México, donde reside desde 1956. Desde allí recordó la «absoluta» importancia de la expresión poética. «Es una corriente continua, una forma de oración que siempre estará con el hombre. En sus horas altas o bajas, la poesía jamás pierde importancia... y por ello cualquier premio para la poesía es siempre especial para mí». Mutis recordó ayer cómo los orígenes y las claves de su narrativa están precisamente en su poesía. Su tránsito de escritor de poemas a escritor de novelas nunca ha significado una ruptura entre uno y otro. «Nunca he sentido que daba un paso de un género a otro. Mis novelas han sido una prolongación de mi poesía. Están hechas del mismo material que mis poesías».

 

El autor de Los elementos del desastre destacó los «trascendentales vínculos» entre la poesía española y la iberoamericana. «Ambas vienen de los mismos clásicos: san Juan, Quevedo... Y, de ellos, yo me quedo con san Juan», añadió Mutis, de quien el lector español puede encontrar lo mejor de su obra en Summa de Magrol el Gaviero. Poesía 1948-1988 (Visor, Madrid, 1992).

 

El Premio Reina Sofía de Poesía fue otorgado ayer por un jurado compuesto, entre otros, por Fernando Lázaro Carreter, Ángel González, Camilo José Cela y José Saramago. Presidido por la Reina, el galardón esta organizado por el Patrimonio Nacional y la Universidad de Salamanca.

 

Noventa candidatos

 

El objetivo del galardón (dotado con seis millones de pesetas y que será entregado el próximo mes de noviembre) es premiar el conjunto de la obra poética de un autor vivo que, «por su valor literario, constituye una aportación relevante al patrimonio cultural común a Iberoamérica y España». Claudio Rodríguez, José Hierro y Ángel Gonzalez son algunos de los poetas que ya han recibido el premio, al que este año han concurrido casi noventa escritores. Los candidatos fueron presentados por las Academias de la Lengua de los países iberoamericanos, la Real Academia Española y los departamentos universitarios de Filología Hispánica, Filosofía y Literatura.

 

Lluvias y ciudades

LUIS GARCÍA MONTERO
Es frecuente que en los libros de Álvaro Mutis aparezca la lluvia tormentosa dispuesta a desbordar los ríos y la selva capaz de invadir los jardines y la vegetación mediocre de los parques públicos. La naturaleza surge a la vuelta de cada desengaño, pero no como un horizonte sagrado y único, sino como un símbolo regenerador que se invoca ante el deterioro de la realidad y de la historia, ante las usuras del tiempo y la civilización. La naturaleza de Mutis tiene el grado de las obras de arte, porque rompe en forma de agua, bosque o luz estelar cada vez que los ruidos de la ciudad componen la música de la pérdida y las tribulaciones de los seres solitarios.

 

El lenguaje del poeta nace de una permanente insatisfacción, porque el deterioro alude también al poder limitado de la palabra humana. La poesía, como la naturaleza, sirve de consuelo, pero resulta imprescindible llevarla al terreno del arte, de la vida ficticia y la invención de heterónimos. Magroll el Gaviero, personaje que habita en las novelas de Mutis, es un hallazgo original de su poesía. Por eso su estilo lírico, muy riguroso en la variedad, se funda en una búsqueda prudente, más creadora que destructiva, en un deseo artesanal que indaga las posibilidades del verso claro, el versículo y los poemas en prosa, muy cercanos a veces al cuento. Los artificios del poeta ofrecen una lucha imaginaria contra las usuras del tiempo.