
Sembrar es esparcir las semillas en la tierra
esporádico, ca
Que ocurre de tiempo en tiempo, sin una periodicidad definida, sino a intervalos irregulares e imprevisibles. Hace tiempo que no viene; sus visitas son esporádicas.
En medicina, se aplica a las enfermedades infecciosas que aparecen inesperadamente, sin que haya una endemia ni una epidemia.
La palabra ha sido tomada asimismo por las matemáticas, como definición de uno de los 26 grupos excepcionales de la clasificación de los grupos finitos simples.
El vocablo tiene un parentesco remoto, pero seguro, con el nombre de las esporas (ciertas células vegetales y cierta forma que adoptan las bacterias para sobrevivir en condiciones desfavorables). En efecto, los pueblos prehistóricos indoeuropeos empleaban la raíz sper- para expresar las ideas de ‘esparcir’, ‘diseminar’, ‘sembrar’, de donde se formaron en griego las palabras σπέρμα (sperma) ‘esperma’ y σπόρα (spora) ‘espora’.
La idea de ‘esparcir’, ‘diseminar’ dio también, con la preposición griega διά-, la voz διασπορά (diasporá) ‘diáspora’, que hoy usamos para referirnos a los grupos étnicos diseminados por diferentes partes del mundo.
Del griego σποραδικός (sporadikós) ‘disperso’, ‘circunstancial’, se formó el latín medieval sporadicus, de igual significado, de donde llegamos a esporádico, que aparece con su forma actual en nuestra lengua por vía culta en la segunda mitad del siglo XIX.