preposicion "a" y complemento directo
Necesito vuestra ayuda por un caso un poco especial.En mi texto se trata de un peñasco que se desmorona por temor por Dios.Sin embargo se trata de un peñasco que no tiene un alma, no se trata de una personificación, es un peñasco que tiene una vida especial que le conviene por su ser, que no es como la nuestra, no como la de los humanos. Quisiera saber si se necesita el uso de la preposición, si es obligatorio u optional, si alguien puede explicarme.He visto que en una gramática se habla de poner la preposición cuando se trata del que actúa (potencialmente activo) aunque no tenga un alma ni sea una persona.He visto a un peñasco desmoronarse por temor hacia Dios.O bienHe visto un peñasco desmoronarse por temor hacia Dios.
En efecto, los objetos inanimados que actúan como complemento directo no requieren ser determinados por la preposición 'a'. Sin embargo, si en contextos particulares, como parece ser el que usted expone, se desea de manera especial personificar un objeto inanimado, es permisible: «He visto a un peñasco...».