
Píldoras en sus blísters
píldora
Medicamento presentado en forma de pequeña bola, generalmente achatada y, en muchos casos, recubierta de tal forma que el medicamento actúe en la zona deseada del tracto digestivo. Desde los años sesenta, con la aparición de las píldoras anticonceptivas, se empezó a usar frecuentemente píldora para designar específicamente ese medicamento, que se constituyó en una segunda acepción del término: el Anovlar lanzado en 1960, fue la primera píldora para evitar el embarazo.
La palabra se formó en español a partir de pĭlŭla, diminutivo del latín pīla, pīlae (pelota). En el portugués actual se mantiene la forma latina pílula, presente también el francés pilule, en pero en castellano, ya en Nebrija (1495) se utiliza la forma actual píldora¸con el mismo significado.
En el Diccionario histórico de la lengua española se presentan documentos del siglo XIV en los que se mencionan diversos tipos de píldoras, tanto para curar enfermedades como para usar como sahumerio.
En La Celestina (1502), Fernando de Rojas intenta convencer a los enfermos a tomarse las píldoras, por más amargas que sean, en beneficio de su salud:
Como el doliente que píldora amarga
O la recela o no puede tragar
Métela dentro de dulce manjar,
Engáñase el gusto y la salud se alarga.
En castellano hay surgido locuciones como dorarle la píldora (a alguien) en el sentido de contar una mala noticia de manera que no resulte tan dura, o también tratar de convencerlo de aceptar algo que en realidad no le conviene. Tragarse (alguien) la píldora¸equivale a ‘dejarse engañar’.