
Fray Luis de Granada, uno de los introductores del verbo ‘adecuar’
adecuado
Apropiado, que se ajusta a las necesidades, exigencias o condiciones de una persona o cosa. Tradicionalmente, la Academia española había rechazado las formas con hiato adecúo y adecúa para la primera y tercera persona del presente de indicativo, respectivamente, pero la frecuencia de su uso la llevó a incluir en su Diccionario de la lengua española tanto adecuo/adecúa como adecua/adecúa.
La palabra proviene del latín adaequāre ‘igualar’, ‘poner en el mismo nivel’. El historiador latino Florus escribió adaequare solo con el sentido de ‘arrasar una ciudad’, mientras que Cicerón usó adaequāre virtutem cum fortunā con el significado de ‘unir el mérito a la riqueza’. El verbo latino se formó a partir de aequalis ‘igual’, ‘del mismo tamaño o edad’, derivado de aequus ‘llano, liso, uniforme’. Adecuar se emplea en castellano desde Fray Luis de Granada (c 1580), mientras que las demás formas del verbo solo aparecen hacia el siglo XVIII.
Cabe agregar que el latín aequālis dio lugar a muchas palabras de nuestra lengua, como ecuador, equidistar, equilibrio (este compuesto en italiano con libra ‘balanza’), equivalente, equívoco (del latín tardío aequĭvocŭs, compuesto con vocāre ‘llamar’).