LA PALABRA DEL DÍA

Por Ricardo Soca

ETIMOLOGÍA - ORIGEN DE LAS PALABRAS
Lunes, 29 de abril de 2024

defensa

LA PALABRA DEL DÍA

Si los militares se dedicaran solo a la defensa, como se alega, no habría guerras

defensa

Antiguamente, y aun hoy en muchos países, los organismos oficiales encargados de asuntos militares se llamaban Ministerio de Guerra, un nombre que aludía exactamente a la función que cumplían: hacer la guerra o prepararse para ella. Sin embargo, con el paso del tiempo, los gobernantes fueron comprendiendo que la guerra suele ser una empresa que da poco prestigio y que quienes se defienden de ella se granjean más simpatía por parte del público y de la prensa.

Los ministerios pasaron a llamarse, simpáticamente, “de Defensa”, así como las asignaciones presupuestarias se llamaron “gastos de Defensa”, aunque estuvieran destinadas a atacar a otros países. En efecto, mientras hoy se entiende que hacer la guerra es una tarea menos noble de lo que se creía algunos siglos atrás, las invocaciones a la defensa nacional todavía despiertan sentimientos patrióticos. Algún ingenuo podría pensar que, si todos se defienden, nadie hará la guerra, pero los hechos no confirman esta presunción.

Defensa se formó en latín a partir del verbo latino defendere, que se derivaba a su vez del verbo arcaico fendo, -ere ’incitar’, ‘estimular’, ‘golpear’, que ya no se usaba en la época clásica. A este verbo se antepuso el prefijo de-, que en este caso significa ‘rechazar, repeler’, para formar defendere ‘rechazar a un enemigo’, ‘proteger o protegerse’. Si a fendere se le antepone el prefijo ob- ’hacia delante’ (con el sentido de oposición), este se convierte en of- (por estar antes de f) y se forma offendere ‘chocar con algo’, ‘golpear algo’, ‘disgustar a alguien’, de donde se derivó nuestro verbo ofender.

EL MEDIEVALISMO DEL DÍA

ferrenio

Derivado de ferro.

1. adj. De hierro. Cf. el portugués actual ferrenho ‘duro, severo, implacable’.

[…] muestran color luzio ferrenio e dízele el latín glauco. Villena. Trad. y gl. de la Eneida, p. 278.

 

PÍLDORAS DE LENGUAJE

Mi hija, que tiene 7 años, está cursando el 2º grado de la escuela primaria. Su maestra le está enseñando a formar familias de palabras. En un ejercicio le pidió la familia de la palabra casa: casita, casona, etc. La maestra le corrigió y le puso que casona se escribe con la letra z. ¿Está bien?

Puede comunicarle a la maestra que está en un error. Los sufijos aumentativos correspondientes son -ón / -ona. Si se aplican a palabras que contienen una -s en su sílaba final, esta se mantiene, no se sustituye por -z: copa + -ón: copón; casa + -ona: casona; bolso + -on: bolsón. Es distinto cuando la palabra sí contiene una -z en su sílaba final: taza + -ona: tazona; brazo + -ón: brazón. También puede existir una confusión con los sufijos -azo / -aza, aunque si se aplica este sufijo, no se elimina la -s original de la palabra base: casa + -aza: casaza; beso + -azo: besazo.

EL LATÍN DEL DÍA

ut sis beatus, et te alicui stultum videri sine.

Para ser feliz, deja que alguien te tenga por necio (Séneca).

Fecha de envío: 
Martes, 2 de abril de 2024