abrojo
Nombre común a frutos producidos por varias decenas de plantas silvestres de diversas latitudes, que están cubiertos de pequeñas garras que se adhieren al pelo de los animales y a la piel de las personas. Estas garras o púas suelen lastimar los pies de los campesinos que caminan descalzos por el campo.
En la Antigüedad, usar calzado era un lujo que solo podían darse los ricos o los que, por lo menos, disfrutaban de alguna holgura financiera. Aun hoy esto es verdad en las zonas rurales de muchos países, donde son comunes las enfermedades que se trasmiten por heridas abiertas en los pies.
En el Imperio romano, los campesinos que vivían en lugares en los que abundaban los abrojos recibían la advertencia aperi oculos ‘abre los ojos’ no tanto, quizás no tanto porque los propietarios rurales se preocuparan por la salud de los labriegos, como por su temor de verse privados de mano de obra barata.
Con el tiempo, el español abrevió la advertencia de aperi oculos a un más simple abrojo.