LA PALABRA DEL DÍA

Por Ricardo Soca

ETIMOLOGÍA - ORIGEN DE LAS PALABRAS
Sábado, 20 de abril de 2024

procrastinar

LA PALABRA DEL DÍA

Procrastinar es dejar para mañana lo que se puede hacer hoy

procrastinar

Aplazar algo, diferirlo, dejarlo para después. Este verbo es definido como una ‘forma de evadir, usando otras actividades como refugio, para no enfrentar una responsabilidad, una acción o una decisión que debemos tomar’.

La palabra se formó a partir del latín procrastināre, formada, a su vez, por composición, con la preposición pro ‘adelante’ y el adverbio cras ‘mañana, el día de mañana’.

En psicología, el sustantivo procrastinación se aplica al sentimiento de ansiedad suscitado ante una tarea pendiente, sin tener fuerza de voluntad para concluirla. El acto que se posterga puede ser percibido como abrumador, desafiante, inquietante o difícil, con lo que se pretende justificar posponerlo a un futuro indefinido.

Este verbo se empezó a usar en castellano hacia fines del siglo XV. Aquí lo tenemos en un fragmento de Avisos para confesores (1552),  de Fray Bartolomé de las Casas (Corde):

(...) penitente que nunca hace verdadera confesión ni penitencia todo el tiempo que no restituye, y así pasa un año y otro en pecado mortal, procrastinando la restitución y satisfacción de tan grandes cargos y deudas.

EL MEDIEVALISMO DEL DÍA

Interior de una vivienda medieval

introsico / introsigo / intrusigo

Del latín introsicus, cruce de intrinsecus con intro-.

m. y f. Ajuar, conjunto de muebles y utensilios de una casa (Menéndez Pidal 1930). Lo mismo que entrosigo.

[...] domos cum omnem suam introsicum, cupas, cupos, catedras, lectos. Port. Mon. (924) Lapesa (2003).

 

 

PÍLDORAS DE LENGUAJE

Me gustaría saber el significado de allornar o ayornar; me dijeron que era de origen italiano pero no estoy segura.

Aggiornare es palabra italiana que significa ‘poner al día’, actualizar, formada a partir del sustantivo giorno (día). Se emplea a veces en español con el sentido de actualizarse, modernizarse, ponerse al día.

Su uso en castellano, así como el de aggiornamento (modernización) se introdujo a partir de las reformas eclesiásticas impulsadas en los años sesenta por el papa Juan XXIII. Posteriormente se aplicó a los partidos, organizaciones y militantes de izquierda que adecuaron sus convicciones a la nueva realidad mundial surgida tras el fin de los gobiernos comunistas de Europa oriental.

Errata: En nuestro envío de ayer, se dijo erróneamente que "la z solo se antepone a las vocales a, e y u", cuando se debió haber dicho "la z solo se antepone a las vocales a, o y u.

EL LATÍN DEL DÍA

nemo mortalium omnibus horis sapit.

Ningún mortal es sabio a todas las horas.

Fecha de envío: 
Martes, 25 de octubre de 2022