escabroso
Se dice del lugar lleno de rocas y pendientes que hacen difícll circular por él, de un objeto áspero al tacto y, metafóricamente, de un asunto que es muy embarazoso y difícil de manejar o de abordar.
El vocablo se empezó a usar en nuestra lengua a comienzos del siglo XVII, como en este fragmento de Cervantes: El fresno escabroso y robusta encina, puestos a la puerta do vive mi vida (Comedia escabrosa de Pedro de Urdemalas, 1615).
En nuestro tiempo es más frecuente el uso metafórico, con escabroso como modificador de sustantivos como tema, asunto, problema, etc., como lo emplea en escritor chileno José Donoso en Donde van a morir los elefantes (1995):
Sus maridos preferían no intervenir en un asunto tan escabroso; algunos se acomodaron sobre troncos tumbados o fragmentos de capiteles.
La palabra nos viene del latín scabrōsus ‘sucio’, propio del latín eclesiástico y este del verbo scabo ‘rascarse’, ambos vinculados con scabrēdo ‘sarna’. Sin embargo, debido a su ausencia en el castellano medieval, parece más probable que nos haya llegado del francés scabreux, aproximadamente del mismo significado.