hocico
Parte anterior de la cara de algunos animales, donde están la boca, la nariz y los mofletes. La palabra se usa también jocosa o despectivamente, para referirse a la boca, cuando es prominente, de una persona.
Los hocicos de los perros presentan una amplia variedad de formas, desde aquellos muy largos, como los collies, hasta los prácticamente inexistentes, como el pug chino, también llamado carlino.
El hocico tomó su nombre del hábito de algunos animales de usarlo para hurgar la tierra u olisquear el suelo, que en algunas variedades romances hispanicas se llamaba fozar o foçar y más adelante, cuando el fonema /f/ se tornó en muchos aspirado, hoçar hasta el siglo XV, y luego hozar. Estas palabras proceden del latín vulgar fodiare ‘cavar’, procedente del latín clásico fŏdĕre ‘cavar’, entre otros significados.
Según Corominas (1980), en Salamanca y en algunos lugares de Cuba, esta h se pronuncia aspirada.
En portugués, lengua en la cual el fonema /f/ se conservó, el hocico se llama focinho.