LA PALABRA DEL DÍA

Por Ricardo Soca

ETIMOLOGÍA - ORIGEN DE LAS PALABRAS
Domingo, 28 de abril de 2024

duende

LA PALABRA DEL DÍA

La habitación de un duende, en un árbol añoso

duende

Espíritu fantástico del que se dice que habita en algunas casas y que travesea, causando en ellas trastorno y estruendo. En las narraciones tradicionales, aparece con figura de viejo o de niño.

En historias infantiles y en cierta literatura sobrenatural o de terror, uno de los temas más recurrentes es la existencia de palacios encantados, casas habitadas por fantasmas o duendes. Estos últimos serían los espíritus de personas muertas, que vuelven para asustar a los vivos, o bien almas en pena, que piden a los vivos que cumplan alguna tarea para poder así descansar en paz. En general, el duende había habitado en vida la casa en la que aparece como espíritu.

Esta palabra se encuentra por primera vez en lengua castellana en el vocabulario del mester de clerecía de Gonzalo de Berceo con el sentido de ‘dueño de casa’, como una contracción en la que la segunda sílaba de la primera palabra se cambia por una ene: duen de casa ‘dueño de la casa’. En el siglo XVI, el duende ya era el ‘espíritu fantástico del que se dice que habita en algunas casas’.

EL MEDIEVALISMO DEL DÍA

Cruzados partiendo hacia Oriente

issir

Del latín exīre ‘salir’.

1. intr. Salir. Lo mismo que exir.

[...] mancebo sea et sierua a seynnor por casamiento o por seruicio de padre que iaga enfermo puede issir de seruicio de su seynnor. Fuero de la Novenera (1253). Corde.

 

PÍLDORAS DE LENGUAJE

¿Ayudarlo o ayudarle?

Las dos formas son válidas.El verbo ayudar bajo el esquema sintáctico «ayudar a alguien a algo» es transitivo, con « alguien» complemento directo y «algo» complemento de régimen, luego, el pronombre átono de c.d. correspondiente a su ejemplo puede ser 'la' (la persona): «para que podamos ayudarla»; lo (el individuo): «para que podamos ayudarlo». Es válido también el uso de le en este último caso (como se da en algunas zonas), el cual sigue su forma etimológica, ya que en latín se construía con un pronombre en dativo (complemento indirecto): «para que podamos ayudarle».

EL LATÍN DEL DÍA

casus fortuiti a nemine praestantur.

Los casos fortuitos no pueden imputarse a nadie.

Fecha de envío: 
Miércoles, 14 de julio de 2021