retaliación
Ley del talión es un concepto jurídico primitivo, por el cual se imponía un castigo idéntico a la falta o delito cometidos. Una de las primeras aplicaciones conocidas de este principio se remonta al código implantado por Hammurabi, el sexto rey de Babilonia, en el siglo XVIII a. C.
Una de las normas de este código establecía: […] si un arquitecto hizo una casa para otro, y no la hizo sólida, y si la casa que hizo se derrumbó y ha hecho morir al propietario de la casa, el arquitecto será muerto […].
Esta idea se repite cuando se precisa:
Si ella [la casa] hizo morir el hijo del propietario de la casa, se matará al hijo del arquitecto.
El término talión es mucho más reciente que el principio jurídico mencionado: fue empleado por los romanos como lex talionis, del latín talis ‘tal’, ‘igual’, ‘similar’. Algunos usos: talionem imponere ‘pagar en la misma moneda’; sine talione ‘sin que le hagan lo mismo’, ‘impunemente’.
Los romanos usaban también el verbo retaliāre ‘responder de acuerdo con la la ley del talión’, que pasó al castellano, principalmente en algunos países americanos, donde es común el uso del sustantivo retaliación, con el significado de ‘represalia’.